Los haikus de Federico

Según parece -abróchense los cinturones, amigos- Federico Jiménez Losantos ha escrito un libro de poemas titulado "La otra vida". Veámos lo que dice la editorial Temas de Hoy al respecto:

"Federico Jiménez Losantos es un gran amante de la poesía, género que cultiva desde la adolescencia y en especial del haiku, una de las más importantes formas de poesía japonesa, y que ha elegido expresamente en este libro para evocar sus sentimientos. En esta edición, de cuidado diseño, se recoge por primera vez una selección de sus más hermosos y evocadores haikus, pinceladas de su vida y recuerdos, con la que podremos conocer su faceta más íntima y desconocida."

Y lo que declara el propio Federico:

"Me gusta mucho este concepto panteísta de la cultura oriental, donde hasta la vida de las piedras es sagrada. La poesía oriental me interesa porque encierra lo esencial poético, lo primitivo que no exige un discurso, y que es la iluminación: un destello que da sentido y trascendencia a una vida que tiene muy poco sentido y ninguna trascendencia, que no es si no un paisaje exterior que te remite a tu interior. Y de pronto un día, hace dos años, me levanté en mi pueblo, había nevado, y me puse a escribir haikus. Pero el haiku, de tan breve y puramente descriptivo, llega a ser una obsesión; al final vas por el campo, ves una basura y piensas, ¿le hago un haiku? Llega un momento en que ni ves la naturaleza."

Una sucinta muestra (real) de esas joyas inmarcesibles:

"Los caminos se pierden en la niebla. Los montes niebla son, el cielo ha huido. La vida se desvanece."

"Mi vida / es un pequeño poema / que empieza por el final".

¿Los montes niebla son? ¿Tu vida un poema? Eso no son Haikus amigo. Eso es una mierda como un piano que evoca una única sensación: el ascopena.

En cambio, ya ves, eso de que ves una basura y piensas...le hago un Haiku... lo entiendo perfectamente. De hecho, a mi me ocurre algo parecido cada vez que escucho tu voz. 

PD. Tampoco encuentro adjetivos -los que se me ocurren son todos constitutivos de delito de injurias- para describir a esa legión de tragaldabas que se congregó a la entrada del Tribunal Superior de Justicia en Valencia para vitorear al ínclito President Camps. Me gustaría saber qué es lo que esa turbamulta de homínidos protofachas considera digno de loa y aplauso: ¿estar imputado? ¿recibir presuntamente trajes by the face? ¿mentir descaradamente?.

Que mundo este.