Cada pulgada cuenta...

Miro alrededor y veo todas esas jóvenes caras y pienso que he cometido casi todos los errores que un hombre de mediana edad puede llegar a cometer. He despilfarrado mi dinero, espanté a todo aquel que me ha amado y últimamente ni siquiera soporto la cara que veo en el espejo.

Cuando uno se vuelve viejo la vida te va quitando cosas. Pero sólo te das cuenta cuando ya hace mucho que comenzaste a perderlas. En la vida, como en el fútbol, el margen de error es muy pequeño. Medio paso tarde o demasiado pronto, medio segundo muy lento o demasiado rápido y no logras la pulgada de terreno que necesitas. Esas pulgadas están por todas partes y, una a una, marcan la diferencia entre ganar y perder, entre vivir y morir.

En cualquier lucha es el hombre que esta dispuesto a morir es el que consigue esas pulgadas. Y yo se que si aún estoy vivo es porque todavía estoy dispuesto a luchar y morir por esas pulgadas. Porque eso es lo que significa vivir: pelear por las seis pulgadas que tienes justo enfrente de ti.

Tony D'Amato (Al Pacino),
A Given Sunday (Un Domingo cualquiera).